Mi pequeña historia.

por Pao.
Tenía 24 años cuando me enteré de mi diagnóstico de hiv positivo. Lo primero que pensé fue " me voy a morir". Lo único que tenía en mis manos era una caja llena de remedios y me preguntaba si esos remedios realmente me ayudarían.
La respuesta tardó 3 meses en llegar: Mi carga viral estaba indetectable y mis CD4 arriba de 300. En ese momento comprendí " la importancia del tratamiento y la buena adherencia", de ser responsable de mis tomas y entender que si hacía todo bien no me iba a morir.
Si estás en tratamiento y te cuesta, no te rindas, no te quedes en el camino del no puedo,no quiero. Pelea porque hoy podemos.
A todos los que comienzan su tratamiento les quiero regalar esta pequeña frase que escribí y espero que les sirva:
" Levanta los sueños, que no se pierdan, que sigan siendo una meta, para que al final del camino mires atrás y puedas decir; valió la pena no dejar de soñar".
pao es voluntaria de Fundación Huesped y trabaja en el equipo de Adherencia